viernes, 27 de diciembre de 2013

SALARIO MÍNIMO 645,3, no hay brotes ni recuperación y se queda "CONGELADO"

Ya se intuía en las últimas semanas que a pesar de vociferar cada día el Gobierno a través de los medios, que ya estamos (están) saliendo de la crisis, esto no se va a reflejar en una recuperación de los salarios y que por tanto el salario mínimo interprofesional (SMI) se queda en 645 euros.

El hecho, es que la congelación del SMI, supone un paso más en la desvinculación de los salarios en la participación de la renta y riqueza producida en el país y pone además en riesgo todos los sistemas de protección social de los que perciben un salario para vivir, al servir como referencia para las cotizaciones mínimas de la SS y como referencia del crecimiento de los salarios.
Por ello podemos concluir que las pretensiones son seguir rebajando los costes laborales de los trabajadores en todos sus aspectos, el directamente salarial y el del salario indirecto y diferido, que necesariamente tendrá que ajustar los sistemas de protección social, entre ellos las pensiones.
Por lo tanto, se va abriendo la brecha para los trabajadores si se quieren comparar con los trabajadores del resto de Europa, dándose en España ahora una realidad con dos nortes geográficos, el del norte de Europa para los impuestos, el coste de los servicios, y la carestía de vida y el norte de africa para las condiciones laborales y los salarios de los trabajadores, por lo que en el mundo laboral, se está produciendo  una fuerte divergencia con el resto de europa.
Un salario mínimo, que roza la pobreza, con unos derechos laborales casi inexistentes y unos sistemas de protección social en proceso de capitalización para quien los pueda pagar, es el plan que tienen trazado y que se esta desarrollando ante una opinión pública cansada de luchar antes de empezar, no es de extrañar que como regalo de navidad el Gobierno nos haya regalado la desvinculación de las pensiones de los indicadores de crecimiento de la vida, la congelación salarial de los salarios de todos los empleados públicos, la desregulación total del contrato a tiempo parcial y la congelación del SMI junto con un brutal recorte de la libertad de las mujeres mediante la modificación de la ley de plazos para la interrupción de la maternidad, y todo esto como vulgarmente se dice, "sin despeinarse".

No hay comentarios:

Publicar un comentario